Nosotras dos comenzamos con unas fantasías bastante solitarias, sintiendo que éramos las únicas personas en el mundo con ideas como las nuestras. Dossie tuvo que luchar para reconciliar sus fantasías de secuestro y cautividad con sus ideas feministas. A Janet le fue duro procesar como una chica buena como ella podía tener ganas de dar palizas a traseros inocentes.
Finalmente acabamos juntándonos con gente que nos guió para darnos cuenta de que había maneras éticas, seguras y saludables de realizar nuestras fantasías sin tomar o entregar más poder del que quisiéramos dar.
La pena es que mucha gente todavía lucha sola con preguntas como las nuestras —aunque afortunadamente es mucho más fácil informarse hoy día.
Hoy unxs ven en una revista o libro erótico que hay cosas que se corresponden con sus fantasías. Otros aprenden en su grupo de apoyo BDSM local, por un anuncio, un puesto en una feria pública o una exhibición pública de cualquier tipo.
Y por supuesto está internet.
Pensamos que no nos equivocamos si decimos que hoy internet es, con mucho, el punto de entrada de la grandísima mayoría de las nueva personas que aparecen en el ambiente BDSM.
Sea cual sea tu punto de entrada, es mejor avisar de que te chocarán muchísimo algunas cosas y realizarás descubrimientos maravillosos al cruzar el umbral para jugar de verdad con compañerxs de carne y hueso.
Fuente: Extractos traducidos de "The New Bottoming Book". Pags. 52. © 2001 Dossie Easton y Janet W. Hardy, "The New Bottoming Book". Greenery Press. NO está traducido todo el texto, sino algunas partes. Para tener toda la información recomendamos, si se sabe inglés, adquirir el libro vía internet
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