Términos básicos

Para dejar claro de qué hablamos al decir cada cosa, dejo aquí la definición de términos habituales del BDSM desde el punto de vista de Dossie y Janet, las autoras de los libros que iré traduciendo. Esto es traducción y resumen (muy resumido) de "The new bottoming book". También vale para explicar en parte la razón de que el blog se llame "Pervetidxs".

Bottom (o persona dominada): Alguien que tiene la capacidad de erotizar o disfrutar de alguna manera unas emociones o sensaciones (como dolor, desamparo, impotencia humillación) que serían desagradables en otra situación. Eso no quiere decir que esa persona disfruta de esos estímulos en el mundo real o en un contexto no consensuado.

Para simplificarlo: "ser dominadx" es lo mismo que "actuar como una persona dominada". No lo olvidemos: No todas las personas que se comportan como dominadas/sumisas/esclavas SON dominadas/sumisas/esclavas. Estan los switch, están lxs que disfrutan comportándose como sumisxs de vez en cuando pero que no se identifican como tal.

S/M no es una perversión, aunque Dossie y Janet se definen a sí mismas como "pervertidas". A Dossie le gusta ser llamada "pervertida radical". Ni les gusta ser clasificadas como una minoría sexual: mientras que sólo una pequeña parte de la población se identifica como pervertida, BDSM, kinky, sadomasoquistas,... alguna —quizás la mayoría— gente incluye algunos juegos que pertenecen al terreno del BDSM.

Es una actividad en que un miembro renuncia al control en favor de otra persona en alguna de estas cuatro "espacios": movimiento, comportamiento, sensación o emoción.
Así que quien juega a puta y cliente, quien ata las manos de su pareja o le venda los ojos, quien le insulta o es insultadx y tantas otras cosas, están jugando con elementos BDSM, aunque unxs puedan pensar de los otros que son unxs enfermxs, pervertidxs o decadentes.

Los juegos de poder existen de muchas maneras en nuestra cultura, a menudo de manera inconsciente, a menudo de manera peligrosa. En el BDSM, con la protección de una comunicación clara y un consentimiento negociado, tenemos un espacio seguro en el que explorar y erotizar algunos de nuestras fantasías más oscuras. El BDSM te permite experimentar, de manera segura, cosa que no lo serían en la realidad.

Fuente: Traducción de "The New Bottoming Book". Pags. 5 y 6.
© 2001 Dossie Easton y Janet W. Hardy, "The New Bottoming Book". Greenery Press.